23 marzo 2019
Uno de los espacios naturales que merece la pena visitar en Girona es el parque dels Aiguamolls de L’Empordà, un área natural protegida formada por dos áreas contiguas, una que se ubica en la desembocadura de los ríos Fluvià y Muga, la otra se ubica al norte del río Muga, además se puede encontrar un inmensa extensión de playa con dunas de arena que bordea todo el parque natural y marcan su encuentro con el Golfo de Roses.
El parque nos ofrece una gran variedad de parajes humedales, dunas de arena, tierras salobres, canales, pastizales en los que habita una gran variedad de especies de aves acuáticas que han convertido este espacio natural en su residencia permanente o en un lugar para descansar durante sus largos viajes, en el caso de las aves migratorias.
Es una experiencia inolvidable observar el vuelo de un martín pescador, o al gran cormorán con sus alas abiertas al sol; también es común observar a las cigüeñas que anidan en árboles muy cercanos a los senderos del parque; este espectáculo que brindan las aves se puede disfrutar todo el año, en veranos es común ver el majestuoso vuelo de los aguiluchos laguneros y en invierno los cielos se visten con los enjambres de jilgueros.
El senderismo es una de las actividades que más se puede disfrutar en este espacio natural protegido, ya que cuenta con una vasta red de senderos bien señalizados en los que se puede encontrar diversos miradores que nos regalan excelentes vistas panorámicas y nos permiten observar la majestuosidad de las aves.